ALGO HABRÁ QUE HACER. Por Miguel Hernández

Miguel Hernández Valverde.// Mientras el Alcalde de la ciudad reúne en un conocido bar de la ciudad a la plana mayor del partido popular, para anunciarles que a partir de septiembre habrá cambios importantes, la ciudad languidece en verano, y lo que es peor sin que el otoño se presente mejor.

Así que de los cambios anunciados para septiembre, lo mejor sería no hacerse muchas ilusiones, ya que cuando una corporación empieza a vender humo, el recorrido de esas propuestas suelen ser muy cortos.

Si de verdad el grupo popular quiere hacer algo por este pueblo, lo primero que tendría que intentar son los  consensos con las fuerzas políticas, sociales y económicas de esta ciudad, lástima que los empresarios sigan sin voz propia y unida, de ahí mi insistencia en la necesidad urgente que tiene esta comarca de tener una asociación fuerte empresarial. Lo segundo poner sobre la mesa un proyecto para la ciudad (Caravaca 2013 – 2020) abierto, flexible y comprometido, donde al final todos rememos en la misma dirección.

De lo contrario, como por desgracia ocurre, volverá a nacer un proyecto sectario y falto de consenso, que son los dos ingredientes imprescindibles para que cuando llegue el fracaso, echarse unos a otros la culpa de todo.

Lleva mucha razón UPyD al sumarse a las críticas que algunos venimos haciendo sobre la falta de proyecto turístico, no solo para la ciudad, sino para el conjunto de la comarca. Es cierto que el clima y las altísimas temperaturas en verano juegan en nuestra contra, sobre todo en el interior de  la Región de Murcia, pero eso no es excusa para acostumbrarnos a dejar morir la ciudad durante los meses de verano.

más pendiente de su futuro personal y
partidista que del interés general de la ciudad. 

El comercio y el turismo (hoteles, restaurantes, bares, etc.) son pilares básicos de la economía en esta ciudad, y no se pueden permitir el lujo de cerrar prácticamente dos meses al año por falta de iniciativas. Se puede y debe hacer algo más, pero por lo visto, quien tiene que liderar estas alternativas, está más pendiente de su futuro personal y partidista que del interés general de la ciudad.

Pero quizás lleva razón quien el otro día me dijo: ‘Mira Miguel, no te compliques mucho más, Caravaca es lo que es y punto’. Pero yo me niego a pensar que los ciudadanos de aquí sólo tengan en su cabeza la palabra fiestas. Caravaca es mucho más.